La foto de un niño sirio refugiado que ha conmovido al mundo entero

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Elpaisa13

 

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Desgraciadamente la historia de Marwan es algo que ocurre habitualmente. Como él, cientos de personas cruzan a diario el desierto que separa Siria de Jordania, intentando huir de una guerra infernal que ha acabado con las vidas, los sueños y las esperanzas de miles de familias desesperadas. Lo extraordinario en esta ocasión son las circunstancias.

Y es que Marwan, o mejor dicho el pequeño Marwan, de solo 4 años, llevaba en una mano una bolsa de plástico casi más grande que él y vestía un sencillo chándal. Así se lo encontraron en mitad del desierto los trabajadores del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y uno de ellos, Andrew Harper, jefe de operaciones del campamento de refugiados de Zaatari, decidió compartir la foto en Twitter, haciéndose viral enseguida.

[Perfil: Andrew Harper, jefe de operaciones de Zaatari]

El niño viajaba en la parte de atrás de un grupo de refugiados y se había separado accidentalmente de su familia durante el viaje, aunque por fortuna pudo reencontrarse con su madre en Jordania gracias a la ayuda de la ONG. Final feliz para ambos en un drama que se repite a menudo.

En estas largas travesías los que más sufren son los ancianos, las mujeres embarazadas, los enfermos y habitualmente los niños, que no pueden aguantar el asfixiante calor y la dura marcha y se quedan rezagados en esta carrera por la supervivencia, tal y como revelaba el propio Harper.

 

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El pequeño Marwan quedándose rezagado (Andrew Harper)

No cabe duda de que la guerra en Siria, que ya se prolonga 3 años en el tiempo dejando miles de muertos, está afectando especialmente a los más pequeños que, poco a poco, se ven obligados a aprender a convivir con la destrucción y el horror. Conscientes de que una simple bala perdida puede acabar con sus vidas o con las de sus seres queridos. Los hay que tienen más suerte y consiguen huir de Siria. Hay 1 millón de niños refugiadosen otros países, especialmente en Jordania, vecino y principal receptor gracias  acampamentos como el de Zaatari.

[Relacionado: Ana Calvo, la doctora que lo dejó todo por amor y por ayudar a los demás en Zaatari]

Mientras que este drama humano se repite día tras día, en Ginebra los representantes de ambos bandos mantienen un debate estéril sobre el futuro del país. Tras dos rondas negociadoras, el acuerdo está lejos de producirse y parece que las posturas están bastante alejadas.

El futuro de Al Assad es uno de los puntos en los que no hay ningún tipo de consenso. Los delegados gubernamentales se niegan a un cambio de mando, mientras que los rebeldes exigen una transición política ya sin la figura del actual presidente.

Pasan los días, la situación no cambia y pequeños como Marwan siguen jugándose la vidaintentando escapar de un país que sigue desangrándose ante la falta de voluntad de todos por llegar a una solución.

Fuentes: Andrew Harper/Yahoo US